Lo necesidad de recuperar una visión estratégica del desarrollo del país

Por. Fredy Gómez. Profesor de Planificación del Desarrollo
La palabra desarrollo se forma con el prefijo des, que se refiere a invertir una acción, y arrollo que viene de arrollar, o rollo: por lo cual, el desarrollo se refiere a desenrollar o desenvolver. Si las personas experimentan ciertas ataduras en el ejercicio de su libertad, el desarrollo es el proceso por medio del cual las personas desatan dichas amarras; por ejemplo, se ha encontrado que la violencia que sufre la mujer es condicionada, entre otras cosas, por la dependencia económica, por lo cual, la generación de proyectos que permitan generar y administrar ingresos monetarios por la mujer pueden contribuir a su eventual libertad financiera que apoye la reducción de la violencia.
El mercado es el gran mecanismo que asigna recursos y lastimosamente también lo hace cuando falla. El estado actual del desarrollo en Guatemala requiere de grandes mejoras de mercado, por ejemplo, en el mercado laboral cerca del 70% no tiene empleos formales, con un salario promedio nacional cercanos a los Q. 2,200.0.
Una visión de país debe iniciar por garantizar la posibilidad de vivir. En Guatemala más de tres mil personas son asesinadas al año y 75 infantes mueren de hambre, por mencionar algunas variables. La migración (forzada en muchos casos) es un indicador que evidencia la imposibilidad de las personas de encontrar razones para vivir en su país de origen.
Una visión también requiere que las personas sepan que acá se puede vivir. El país ha avanzado en incrementar la expectativa de vida en el país y lo seguirá haciendo. Para 2022 la expectativa era de 73.4 años, en tanto hace 20 años, en el año 2000, era de 67.7 años; sin embargo, dicha expectativa se presume bastante menor en grupos históricamente excluidos con el agravante de una reducción en años de vida derivado de la pandemia COVID-19. Lo anterior se relaciona con que cerca de un 12% de la población ha migrado, pues no encuentran razones para materializar su plan de vida en Guatemala; en inicio se migra por trabajar pero no es descabellado pensar que las personas no retornaran al país de no encontrar incentivos para hacerlo.
La visión de país debe ser técnicamente diseñada. Tomando como ejemplo países que han avanzado en ello, es importante: i) establecer una línea base de indicadores nacionales, los cuales pueden focalizar en aquellas áreas en que estamos plenamente de acuerdo, como serían los infantes que mueren de hambre o las personas asesinadas, especialmente mujeres. De igual modo deben incorporar la sostenibilidad, no solo de las generaciones humanas futuras sino del ecosistema; ii) la selección de áreas de impacto, como es la nanotecnología en Taiwán, la industria naviera en Korea del Sur, o la infraestructura en Kazajstán a nivel nacional deben quedar explicitas. iii) Importa el diseño de mecanismos o incentivos, como las deducciones impositivas a los territorios, en zonas especiales, o las deducciones de costos en capacitación e investigación, como lo hace Chile en Corfo; y, muy importante. iv) importan los objetivos de política y ellos considerando la situación actual y deseada. No se puede hacer todo a la vez y deben ambicionarse metas valiosas de forma gradual. v) No debe descuidarse que la participación o autodeterminación debe promoverse y que existe un sistema democrático que permite la elección de plataformas nacionales y que ellas deben articularse a las visiones territoriales y comunitarias.
La visión debe ser legítima y deben existir responsables de su gestión. En el mundo han surgido distintos sistemas para mejorar la implementación de estrategias y, sobre todo, proyectos de alto impacto. El llamado Segundo Piso en Chile, la Casa de Gobierno en Brasil, las comisiones de futuro en varios organismos legislativos, en distintos países o pequeñas oficinas con gran poder de implementación de proyectos, de una u otra manera todos han funcionado y hay lecciones de ello, como los sistemas de seguimiento o las nuevas leyes y normativas. Con el intenso desarrollo de los mercados, especialmente financieros y de exportación, y con amplia movilidad laboral, la cancha es el mundo, jugar requiere de estrategia.
Quienes han logrado superarse han sido aquellos que han tomado conciencia de su condición y, habiendo definido el puerto al cual llegar, han modificado una y mil veces las velas para adecuarse a los vientos, ello le da carácter al desarrollo, pues quien que se aferra a la búsqueda de la libertad sabe que en sus manos reside el poder para liberarse.